A continuación, después de la tradicional foto del claustro de profesores, dio inicio el acto académico en el Aula Magna, presidido también por el Gran Canciller de la Facultad. El momento más efusivo llegó tras la lectura del nombramiento de D. Roberto Calvo Pérez como nuevo Decano de la Facultad de Teología del Norte de España, sede de Burgos, para el trienio 2023-2026, y después de sus primeras palabras como Decano, en las que destacó el gran aprecio que siempre ha tenido por esta Facultad desde que estudió en ella y sus deseos de seguir trabajando en unidad y con ilusión de cara al futuro, especialmente para consolidar las nuevas especialidades de estudio iniciadas recientemente. El nuevo decano reconoció que este camino que ahora emprende estará marcado por dificultades y limitaciones, pero que espera poder estar a la altura y entregarse con generosidad en la tarea encomendada.
El Gran Canciller de la Facultad de Teología, D. Mario Iceta Gavicagogeascoa, dio por inaugurado el nuevo curso con la toma de posesión del nuevo decano de la Facultad, D. Roberto Calvo Pérez, y la tradicional lección inaugural en el Aula Magna.
El pasado viernes 27 de octubre tuvo lugar la ceremonia de apertura del nuevo curso académico en la Facultad de Teología, haciendo coincidir dicho evento con la toma de posesión del nuevo decano, recién nombrado por el dicasterio para la Cultura y la Educación de la Santa Sede. Los actos dieron comienzo con la solemne celebración de la Eucaristía, presidida por el Gran Canciller, concelebrada por un buen número de sacerdotes y acompañada por muchos alumnos, amigos, bienhechores y otras personalidades relacionadas con la Facultad; entre ellos hay que destacar la presencia del Decano de la sede hermana de Vitoria, D. José Antonio Badiola Saenz de Ugarte, y de los directores de otros centros afiliados, como D. José Manuel García Matos, Director del Instituto superior de Teología de Tenerife, y D. David Álvarez Cineira, Director del Estudio Teológico Agustiniano de Valladolid. En la homilía, el arzobispo puso en valor la tarea formativa que desempeña la facultad al servicio de la archidiócesis e hizo un llamamiento a poner la teología al servicio de las necesidades pastorales de nuestro tiempo presente, porque razón y fe van de la mano para dar respuestas al hombre de hoy.
Después tuvo la palabra Dña. Ana Antón Delgado para hacer en nombre de la secretaría la lectura de la memoria académica del curso pasado, que como en ocasiones anteriores sigue poniendo de manifiesto el notable alcance y repercusión que tiene la Facultad de Teología a nivel nacional e internacional tanto por el número de alumnos que dependen de ella como por la variada oferta de estudio que ofrece en sus distintos niveles y modalidades.
La guinda del acto académico fue puesta por el Dr. D. Fernando Susaeta Montoya, profesor de la casa que presentó la lección inaugural titulada «En las entrañas del pensamiento español del siglo XXI. ¿Una filosofía primera entre la tragedia y la nostalgia?», en la que propuso hacer un análisis de la crisis cultural, política y espistémica que padece la sociedad actual en comparación con el acontecimiento del incendio de la Catedral de Notre Dame, y explicó qué tipos de nuevos paradigmas están emergiendo y cómo el logos es quien puede poner la esperanza en medio de la tragedia y la nostalgia.
El acto académico contó con la presencia de varias autoridades civiles, como D. José Luis Concepción Rodríguez, presidente del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, D. Juan Carlos González Díez, General Jefe de la División “San Marcial”, D. Fernando Martínez-Acitores Puig, vicealcalde de la Burgos, y D. Pedro L. de la Fuente Fernández, Subdelegado del gobierno en Burgos. También participó en el acto el Rector de la Universidad Isabel I, Alberto Gómez Barahona, la Directora General de la Fundación Círculo, Dña. Laura Sebastián Vega, y el cronista de la ciudad de Burgos, D. José Manuel López Gómez.
Finalmente, el Gran Canciller concluyó la apertura oficial del curso deseando a todos los alumnos y profesores un feliz año académico de estudio y dedicación al servicio de la teología.
